Páginas

martes, 7 de abril de 2015

Luces del día. Fundación Juan March

El pasado sábado 28 de Marzo concluyó el ciclo Luces del día en la sala de conciertos de la Fundación Juan march. Un ciclo de cuatro conciertos de piano celebrado los cuatro sábados por la mañana en el mes de Marzo. Ha sido otro de los muchos programas interesantes que nos ofrece la Fundación Juan March dentro de sus actividades anuales.

La idea, con mucho acierto, era representar mediante obras musicales al piano las distintas horas del día, amanecer, mediodía, atardecer y claro de luna. Solo con el "claro de luna" es fácil que se te venga a la cabeza Debussy y Beethoven, incluso algún nocturno romántico. El ciclo, con gran empaque, cubrió gran parte de los estilos músicales y sus épocas, desde el barroco hasta nuestros días. Como fondo en el escanario se proyectaban a tiempo real imágenes del cielo tomadas a la hora representada.

Albert Guinovart fue el encargado de cerrar el último concierto. Hizo las veces de intérprete y de compositor. Un lujo delitarnos con un estreno, su Clar de Lluna. Nos dejó al inicio, en la mitad del concierto y al final, tres de sus obras. Correlativas en el tiempo se pudo ver la evolución de su obra desde un estilo romántico con una armonía clásica hasta una obra más íntima e impresionista con evocaciones a Debussy. Gracias por el estreno.

Con qué limpieza y pulcritud Andrea Baccetti nos permitió escuchar esas Variaciones Goldberg para luchar contra el insominio. Y por qué no permitir el pedal en las mismas en contra de los más puristas. Ni Glen Gould  pero  lejos Daniel Baremboim.

Tamar Beraia pasó por el nocturno nº1 de Chopin como un ladrón de guante blanco en mitad de la noche. Sin sobresaltos, limpiamente, sin hacer ruido. Manteniendo un balance entre ritmo y sonoridad, sin rubatos ni grandes fortes. Genial ese Bártok.

Se notó en Diego Cayuelas que disfruta con Ravel, supliendo quizá la confianza de catedrático que originó cierta impresión de estar pegado a la partitura, como casi una primera lectura en las pequeñas obras de Tchaikovsky. Tirón de orejas. Soberbia Alborada.

Gracias a la Fundación Juan March por estas oportunidades que nos ofrece de poder disfrutar de los grandes genios compositores de la mano de intérpretes de tanta calidad y técnica reconocida.

Si queréis escuchar los conciertos, aquí su link. Por tiempo limitado.


No hay comentarios:

Publicar un comentario